5 ideas para una decoración de mesa excepcional

Elegir el mantel adecuado Para elegir el mantel adecuado, le recomendamos que se fije en: - Su forma: redonda, ovalada, cuadrada o rectangular, según la forma de su mesa; - Su tamaño: fíjese en el voladizo del mantel, que debe ser de al menos 30 cm; - Su tejido: Sus colores: blanco si busca versatilidad, estampado o de color para un poco más de originalidad o temático para adaptarse a sus eventos. Utiliza las servilletas para decorar tu mesa Si tienes tiempo (y ganas), no dudes en doblar tus servilletas. Por ejemplo, puedes doblar las servilletas para guardar los cubiertos. O doblar las servilletas a juego con el acontecimiento (como un copo de nieve en Navidad, por ejemplo). Si de verdad quieres ser original, echa un vistazo en las redes sociales. Se nos han ocurrido algunas ideas originales, como la servilleta menú, la servilleta sobre (ideal para esconder una invitación o un anuncio, por ejemplo), la servilleta lazo (cada vez más popular) y diferentes formas de servilletas (árbol de Navidad, conejo de Pascua, hombrecito, etc.). Vajilla: tu mejor aliada para una mesa chic Dedica también un poco de tiempo a elegir tu vajilla. Estos son los puntos importantes en los que debes pensar: - El material: gres para la autenticidad, barro para lo chic o porcelana para todas las ocasiones; - La practicidad de tu vajilla en función de los platos que vayas a preparar; - El estilo y el color: disponer de una amplia gama de vajillas te permitirá adaptarte a todas las situaciones y eventos. Evidentemente, la vajilla incluye platos, vasos y cubiertos de diseño. El arte de decorar el centro de mesa Una vez colocado el mantel y listas la vajilla y las servilletas, es hora de centrarse en el centro de mesa. Puedes colocar flores de temporada en jarrones: clásico, sí, pero eficaz. O elige elementos de temporada (madera para el otoño, conchas para el verano, elementos de algodón que recuerden a la nieve en invierno, etc.). No descuides la luz Por último, no te olvides de la luz, que puede marcar la diferencia cuando llega la noche. No debe ser ni demasiado clara ni demasiado tenue. Si tienes una lámpara colgante que te permite regular la intensidad de la luz, es perfecto; si no, nada como las velas y una iluminación tenue para crear un ambiente acogedor o romántico. Tómate tu tiempo para hacer algunas pruebas y encontrar la luminosidad adecuada.