¿Cómo convertir una cama en un sofá?

¿Cómo convertir una cama en un sofá?

¿Tu hijo ha crecido y has sustituido su cama individual por una doble? ¿No quiere deshacerse de ese espacio extra para dormir, pero no sabe cómo reutilizarlo? Los modernos bancos son la solución perfecta para dar una nueva vida a una cama individual. Además, tienen la ventaja de ofrecer un espacio extra para dormir a algún invitado de paso. Aquí tienes tres consejos para transformar tu cama en un sofá.

Elige cojines de todos los tamaños

Esta es la solución más barata y sencilla para los que no saben hacerlo todo ellos mismos. Para transformar una cama en sofá, tendrás que crear el respaldo que falta para que tengas toda la comodidad que necesitas. Si piensas colocar tu cama individual junto a una pared, los cojines son una buena forma de crear un respaldo cómodo y atractivo.

No escatimes en cantidad y no temas variar los tamaños y las formas: cojines grandes o pequeños, cuadrados, rectangulares, redondos o largos, juega con las capas para conseguir un asiento suave y elegante. Varía también los colores y estampados de las fundas.

Añade un asiento de madera a tu cama

Para un respaldo cómodo y sólido, nada como una estructura de madera a la que puedes añadir espuma y tela.

No hace falta ser un experto en bricolaje: es muy sencillo. En primer lugar, mide la longitud de tu cama y compra una plancha de contrachapado unos centímetros más corta. Compra también un rollo de espuma para el tapizado.

Taladra agujeros en la madera de la parte posterior del somier, también en sentido longitudinal, y atornilla el contrachapado. Con cola para madera, fija la espuma a la parte delantera del panel de madera y cubre también alrededor de un tercio de la superficie trasera. Utiliza unos alicates para sujetar firmemente la espuma durante toda la noche.

Compra un poco de tela y córtala en dos trozos: una parte cubrirá el asiento de tu cama / sofá, la otra parte cubrirá la parte trasera. Utilizando una grapadora, fija la tela a la madera contrachapada. Para el asiento, simplemente cúbrelo como harías con una colcha.

Crea un marco con puertas viejas

Más sorprendente pero muy estético, puedes crear reposabrazos y un respaldo utilizando puertas viejas. Basta con cortarlas a medida y clavarlas. Es fácil encontrar bonitas puertas viejas en Internet, en mercadillos o en ventas de garaje.

Sólo tienes que lijarlas y pintarlas del color que prefieras. Añade unos cojines y tu cama se transformará en un sofá único y original.