¿Cómo reconocer un auténtico sofá Chesterfield?

¿Cómo reconocer un auténtico sofá Chesterfield?

¿Qué aspecto tiene el sofá Chesterfield?

El sofá Chesterfield se reconoce inmediatamente por su forma. A primera vista, tiene el aspecto de un mueble aristocrático, con reposabrazos curvados a ras del respaldo. Este aspecto alto y curvado le permite reflejar los diseños de muebles de la monarquía británica. El lujo y el confort están presentes en todos los aspectos de este sofá.

El acabado de un sofá Chesterfield es original. Sus filas están rematadas con clavos para una fijación y durabilidad óptimas. Su respaldo está decorado con botones que se fijan para que la tapicería apunte hacia el interior del mueble. Es precisamente esta botonadura la que le da su bonito aspecto vintage y retro.

El mueble se apoya sobre patas de madera maciza. Esta sólida base lo ha hecho inmortal hasta nuestros días. En cuanto al asiento, es bastante bajo, pero la comodidad está asegurada gracias a un acolchado que a menudo le da un aspecto más o menos curvado. En resumen, el sofá Chesterfield es una auténtica obra de arte.



¿Cómo distinguir un auténtico sofá Chesterfield de una falsificación?

Al tratarse de un mueble muy codiciado por muchos aficionados al interiorismo, sobre todo a la decoración vintage, en el mercado se venden muchas falsificaciones de sofás Chesterfield. Estas falsificaciones están bastante bien reproducidas, y no es raro confundirlas con auténticos sofás de la época aristocrática inglesa.

Hay algunos trucos para distinguir los falsos de los auténticos. Lo primero que hay que tener en cuenta son las patas. Los sofás Chesterfield son famosos por su solidez, así que deberían tener bases de madera maciza. Si no es así, se trata de una falsificación.

Una vez inspeccionadas las bases, hay que comprobar la tapicería. En el caso de un sofá Chesterfield auténtico, el revestimiento debe ser de piel de vacuno gruesa y finamente aplicada. Los sofás falsos, en cambio, suelen estar tapizados en símil piel. Los sofás auténticos están tapizados con botones clavados en puntos de anclaje centrales. Este no es el caso de las falsificaciones. Los auténticos sofás Chesterfield suelen estar tapizados con espuma de poliuretano para garantizar la comodidad del asiento y el respaldo.